Día 10 : Río Dulce – Livingston, el caribe de Guatemala – Río Dulce
Empezamos el día en Río Dulce a las 6 de la mañana asomándonos a la ventana y confirmando que ha dejado de llover después de estar toda la noche el cielo llorando, aunque sigue estando bastante nublado y es que ayer cuando llegamos a Rio Dulce desde Semuc Champey, nos dijeron que llevaba días sin parar de llover hasta justo esa tarde. Sabemos que tenemos suerte con el tiempo, pero a veces no sale el sol tan rápido, aunque esperamos que para cuando estemos en Livingston, el caribe de Guatemala, luzca sobre nosotros.
Después de arreglarnos nos vamos directos al salón de desayunos del Marine Yatch a trabajar un rato, acompañados de un café, una brisa que da vida a estas horas de la mañana y Julio Iglesias de fondo, que tenemos que decir que pese a no gustarnos, le da un toque de lo más original a este comienzo de jornada, hasta que empiezan a llegar los propietarios de los barcos del embarcadero, que hoy tienen una especie de feria de intercambio en el salón, algo que verdaderamente nos desconcierta siendo este el salón de comidas del hotel, donde están ocupando todas las mesas sin prestar ninguna atención a los que allí estamos, con poca educación en el trato, incluso no hablando ni una palabra de español con el staff del hotel que no habla inglés y se nota que hacen un verdadero esfuerzo en hacerse entender.

Cómo ir de Río Dulce a Livingston
– Lanchas compartidas: Puedes reservarlas directamente en el embarcadero, en una agencia o en el alojamiento. El trayecto dura aproximadamente 45 minutos, sin paradas intermedias y el precio es de 30$ por persona. Tienen horarios regulares a lo largo del día.
– Lancha privada: Esta opción también puedes reservarla directamente en el embarcadero, a través de una agencia, nosotros lo hicimos con Destinations Guatemala, como el resto de transportes del viaje a Guatemala y Honduras o a través de tu alojamiento. Al ser transporte privado, puedes emplear el tiempo que quieras, tanto en el traslado de Río Dulce a Livingston (suele ser de más o menos 1 hora y media) como en el tiempo que quieras pasar en Livingston.
Nosotros comparamos precios con la agencia y directamente y con el hotel y nos dieron el mismo precio: 100 dólares por todo el día.
Nosotros optamos por la segunda opción, tanto por tiempos, ya que puedes estar el tiempo que quieras y hacer paradas intermedias, como la tranquilidad de ir solos y poder hacer fotografías con más calma.
Por este motivo no conocemos si es posible regatear el precio en las lanchas compartidas, aunque a primera vista, diríamos que es posible, por lo que conviene comparar precios.
Como comentábamos nosotros hemos optado por la opción de ir de Río Dulce a Livingston, el caribe de Guatemala, en lancha privada, quedando a las 9 de la mañana en el embarcadero del Marine Yatch justo al lado de nuestra habitación.
A estas horas vuelve a estar el cielo cubierto y empieza una leve llovizna, que esperamos desaparezca en breve, al menos para que nos deje disfrutar del traslado de Río Dulce a Livingston, el hogar de los garífunas en Guatemala.

Puntuales, pasados unos minutos de las 9 de la mañana estamos ya acomodados en la lancha, poniendo camino al Castillo de San Felipe, uno de los iconos y símbolos de Río Dulce, a poco más de 10 minutos del embarcadero. La idea inicial era hacer una breve parada aquí, pero viendo como está el cielo, preferimos no arriesgarnos y dar una vuelta por la zona, llevándonos una perspectiva desde el agua de una de la fortaleza.

El Castillo de San Felipe se construyó para proteger a los pueblos de la zona de Izabal de los piratas en el año 1652, aunque al final acabó siendo incendiado varios años después y reconstruido en 1956, tal y como lo podemos ver hoy en día.
Rodeados de embarcaciones, damos media vuelta, para poner dirección a Livingston, el caribe de Guatemala, pasando por varios puntos, entre los que están la isla de las aves y la isla de los pájaros, ambas el el Golfete, habitadas por cientos de aves acuáticas.

Desde aquí seguimos remontando río arriba, rodeados de casas y lujosas villas, todas con embarcaderos y vistas espectaculares, rodeadas de vegetación que a medida que avanzamos empiezan a desaparecer, dejando paso a viviendas menos lujosas, con pequeños embarcaderos, con hamacas, que nos dejan unas imágenes que seguro, tardaremos en olvidar.


El trayecto de Río Dulce a Livingston cada vez se hace más interesante, viéndonos rodeados de selva tropical, salpicada por pequeñas aldeas, en las que viven de la pesca en un entorno increíble, del que entendemos se han enamorado muchos viajeros, quedándose en esta zona a vivir.

Cuando llevamos unos 45 minutos de trayecto, llegamos a la zonas de las fuentes termales, donde hay una fuente que vierte agua sulfurosa desde un acantilado, directamente al río, donde puedes bañarte en una especie de pozas, especialmente preparadas para el turista.

Como nos pasó anteriormente con el Castillo de San Felipe, optamos por saltarnos esta visita, en esta ocasión no por el mal tiempo, si no todo lo contrario. El tiempo está cada vez más soleado y ante la previsión que no dure demasiado, preferimos aprovecharlo para acabar de hacer el trayecto con buen tiempo y si después tenemos tiempo y ganas, hacer la parada de vuelta a Río Dulce.

Seguimos el trayecto pasando por la Cueva de la Vaca, una pequeña cueva en un desfiladero que está prácticamente cubierta de vegetación, para seguir hasta la Pintada, una gran pared, en la que a lo lejos divisamos los grafitos que nos dice nuestro guía.
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Seguimos el trayecto acercándonos cada vez más a Livingston, el caribe de Guatemala, notando como va cambiando el paisaje que nos rodea, haciéndose cada vez menos denso y empezando a aparecer de nuevo las edificaciones, en esta ocasión con algo más de altura, contra más nos acercamos a la localidad.


Llegamos a Livingston con un cielo ya muy despejado y nada más desembarcar empezamos a notar ese ritmo caribeño que veníamos buscando cuando planteamos llegar hasta aquí, rodeados de pequeñas casitas de colores que hacen de este un entorno único.

Nada más llegar y viendo que Livingston es lo bastante pequeño como para recorrerlo en unas horas, aprovechamos para parar en Buga Mama, un restaurante muy recomendado, con unas vistas preciosas sobre el río, donde tomamos un café y una cerveza por 16 quetzales que nos sientan de maravilla y nos animan a seguir con el recorrido del día cuando ya son casi las 11 de la mañana.
Empezamos a recorrer Livingston, el caribe de Guatemala por su calle principal, que tenemos que decir es una delicia para los sentidos, con un rollito único, con música caribeña sonando de fondo y unas escenas cotidianas que nos siguen confirmando el acierto que ha sido venir hasta aquí.


¿Visitar o no Livingston?
No podemos decir que hayamos encontrado mucha información en internet sobre este lugar, ya que no hay demasiada. Lo que sí habíamos leído es que mucha gente llega hasta Río Dulce, pero no hace el recorrido por río hasta Livingston.
Después de nuestra experiencia, tenemos que decir que uno de los motivos para llegar hasta Río Dulce, por no decir el único, sería llegar después hasta Livingston. Si no tenéis tiempo para hacer noche aquí, podéis haced la excursión de un día, es totalmente recomendable y en 3 horas podéis recorrer esta población caribeña, que os aseguramos no os dejará indiferente.
A medida que vamos avanzando por la calle principal de Livingston nos vamos adentrando más en esta localidad, sin acceso por tierra con el resto del país, hogar de los garífunas, náufragos de los barcos de esclavos africanos que acabaron mezclándose con los indígenas de la zona y que tenemos que confesar, nos está gustando más a cada paso que damos.

Os recomendamos que no sólo os centréis en la calle principal de Livingston, si no que os adentréis en las callecitas paralelas, donde podréis ver la vida local y esos detalles por los que este lugar es un rincón increíble de Guatemala y también un lugar totalmente distinto a lo que habíamos visto hasta ahora en el viaje a Guatemala y Honduras por libre.


Son más de las 12:30 cuando decidimos que es el momento de ir a comer y viendo lo bien que estaba la carta del Buba Mama, el restaurante con vistas al mar donde estuvimos esta mañana tomando café y considerando que dicen de él que sirve el mejor marisco de Livingston, no lo dudados y eligiéndolo como lugar para comer. Pedimos unas quesadillas de camarones (gambas para nosotros) y un plato de pescado más agua y coca cola por 190 quetzales que tenemos que decir están más que justificados y es que hemos comido de fábula.

Comer en Buba Mama ha sido todo un acierto, aunque eso sí, os recomendamos que no vengáis con prisa, en Livingston, como prácticamente en toda Guatemala, hay que asumir que el ritmo caribeño está presente en todos los rincones, así que lo mejor es adoptarlo y disfrutar.
Son ya casi las 3 de la tarde cuando llega el momento de despedirnos de Livingston y emprender el regreso en lancha a Río Dulce, donde pasaremos nuestra última noche en Guatemala, antes de poner camino mañana hacia Honduras.
El camino de vuelta lo hacemos bajo un sol espectacular y unas nubes que adornan un cielo que por momentos nos recuerda a los paisajes espectaculares que conocimos en el Amazonas, salvando las distancias.


El trayecto de vuelta a Río Dulce desde Livingston lo hacemos en poco más de 50 minutos, disfrutando de unos paisajes espectaculares que nos recuerdan a cada paso, los muchos motivos por los que viajar nos hace tan felices.
Avisamos a nuestro lanchero para que nos deje en el embarcadero de Río Dulce, en vez de en el hotel para poder dar así una vuelta por la calle principal, y casi única de Río Dulce, y también cruzar su emblemático puente, donde siempre hay alguien parado para admirar las vistas increíbles que hay desde allí del río y la increíble panorámica de los alrededores.


A medida que vamos avanzando por el puente, bajo un sol abrasador, nos encontramos con unas vistas cada vez más bonitas de Río Dulce, que no se pueden tener desde ningún otro lugar que no sea desde aquí, por lo que os recomendamos que si podéis, hagáis una parada en esta zona, al ser posible a pie, para poder disfrutar de una preciosa perspectiva.


Después de este improvisado paseo por Río Dulce y una parada para comprar algunos snacks para mañana, llegamos al hotel cuando son casi las 6 de la tarde, algo más tarde de lo previsto, pero aún con tiempo a disfrutar de unas horas de relax, que no vamos a negar, nos sientan de maravilla.

Después de unos refrescos, un rato de lectura y piscina, toca pasar por la habitación para dejarlo todo recogido para mañana, antes de salir a cenar al restaurante del Marine Yatch donde pedimos unos nachos, pollo a la plancha con pasta y dos limonadas por 247 quetzales, que tenemos que decir, están buenísimos.

Nuestra última cena en Guatemala, un país que nos ha enamorado y donde volveremos seguro, a recorrerlo y saborearlo con lentitud…
Pau dice
Hola,
Qué opinión tenéis de las playas de Livingston? Son bonitas?
Vale la pena hacer noche o pasar más de un día en Livingston?
Gracias!
Vane y Roger dice
Hola Pau,
A nosotros nos gustó mucho la zona pero no para pasar más de un día además de que nos pareció que más que ser «una playa bonita» lo que tiene es el conjunto, ya que el ambiente es también muy chulo. Pese a eso, esto depende mucho de lo que busques y hay que tener en cuenta que nosotros en ese momento no buscábamos pasar días en la playa.
Saludos
LIDIA GRAU dice
Buenas, vamos a Guatemala, en marzo-18, de ruta desde Flores-Tikal… no sabemos si hacer 2 noches en Semuc-Champey y 1 en livingston, para luego ir hacía Copan… nuestra ruta es: Antigua 1 noche-Lago Atitlan 2 noches-Flores en avion-tikal 2 noches…y de aquí el dilema.. de 2 noches en Semuc… ó 2 noches en Livingston… luego 1 noche copan, 2 noches Antigua y 1 noche ciudad cerca aeropuerto (salimos de madrugada)
Quá hariais?? gracias y felicidades por el diario
Vane y Roger dice
Hola Lidia,
La verdad es que depende mucho de lo que os guste, ya que Semuc Champey y Livingston no tienen nada que ver y para llegar a ambos, podríamos decir que tienen más o menos la misma «dificultad».
Para nosotros Semuc Champey es increíblemente bello, pero en la zona de Livingston hay más cosas que hacer.
Saludos
David dice
Hola,
Querríamos hacer un camino parecido al vuestro desde Rio Dulce y querríamos saber cuanto os costo el conductor privado de Rio Dulce a Copán?
Como puedo contactar con el vuestro?
Muchas gracias,
David
Vane y Roger dice
Hola David,
Este fue el trayecto más caro de todos los que hicimos, pero al ser un pack, ya que contratamos todos los servicios de traslados con Destinations Guatemala, no sabríamos darte el precio exacto.
Puedes escribirles a través de su web destinations guatemala y pedir una cotización.
Todos los traslados con ellos fueron de 10 😉
Saludos
Ster dice
Hola!
Hemos comprado unos billetes para ir un mes entero a Guatemala sin saber qué ver y dónde ir….(espero no arrepentirme!) Nos vamos a empapar de vuestro blog aunque, nos gustaría saber vuestra impresión general del país. Os gustó?
Vane y Roger dice
Buenos días Ster,
La verdad es que tenemos que decir que es uno de los viajes más increíbles que hemos hecho nunca. Guatemala es un país impresionante. Y si tenéis un mes, podéis valorar la opción de pasar unos días en Belice o incluso en Honduras. Saludos
Marta Castaño dice
Donde recomendais hacer una noche en Livingston o Rio Dulce? Que zona os gustó mas?
Gracias 😉
Vane y Roger dice
Hola Marta,
Como zona para alojarte, si tienes varios días, te recomendamos Livingston, pero si únicamente tienes dos noches y los desplazamientos son por la tarde, como nos pasaba a nosotros, lo mejor es quedarse en Río Dulce y hacer la excursión de un día a Livingston. Saludos!