Día 23 : Isla de Pascua: Ahu Tahai, Ahu Ko Te Riku, Rano Kau y Orongo, Vinapu, Ana Kai Tangata y Ahu Akivi
Hoy es nuestro primer día completo en Isla de Pascua así que nos levantamos un poquito más tarde, aprovechando las increíbles vistas que tenemos desde nuestra habitación del Hangaroa Eco Village Spa y cuando son las 8:30 más o menos, nos acercamos al Restaurante Poevara, donde nos espera un desayuno buffet, que nada más verlo, ya nos carga de energía para lo que nos espera el día de hoy, dos de las visitas más importantes de Isla de Pascua: Rano Kau y Orongo.

Cuando empezamos con los preparativos de este viaje a Chile en 31 días, ya teníamos bastante claro que Isla de Pascua sería el último lugar que visitaríamos, además de querer dedicarle el tiempo suficiente como para, además de conocer lo máximo posible de la isla, la pudiésemos disfrutar con tranquilidad. Aunque nos habían dicho que en 2-3 días se puede visitar la isla, algo que materialmente, tenemos que decir que es posible, nosotros preferimos ampliar nuestra estancia algunos días más, llegando a tener 6 días completos más 2 medios días, el de llegada y el de salida.
Este planteamiento, nos ha permitido disfrutar al máximo de Rapa Nui, además de poder variar las visitas previstas en función del tiempo, ya que en Isla de Pascua suele llover cuando menos te lo esperas, algo que si únicamente estás 2 o 3 días, puede resultar molesto para visitar los diferentes lugares turísticos.
Cuando son más o menos las 9:30 de la mañana salimos del Hangaroa Eco Village Spa para recoger el que será nuestro coche de alquiler los próximos días y que hemos alquilado con la empresa Rent a Car OCEANIC.
Desde el hotel estamos a más o menos un kilómetros de la calle principal de Hanga Roa, donde se encuentra la compañía de alquiler de coches, así que nos colgamos las mochilas y nos ponemos en camino, recorriendo las calles de este pequeño pueblo en el que sólo nos han hecho falta pasar unas horas para enamorarnos y saber, que en algún momento volveremos para pasar aquí una temporada.
Si no dispones de coche una buena opción es reservar este tour por Orongo y el volcán Rano Kau con guía en español.

Llegamos poco antes de las 10 de la mañana y después de revisar el que será nuestro coche, hacerle varias fotos y concretar el día de entrega, nos ponemos en marcha para ir de nuevo a Tahai, donde estuvimos ayer, el día que llegamos a Isla de Pascua por la tarde, pero donde queríamos volver a venir, ya que la mejor luz es por la mañana, algo que aunque pueda no parecer importante, tanto para las fotografías como para la visita, resulta más que interesante tener en cuenta.
Coche de alquiler en Isla de Pascua
Hay varias opciones para alquilar coche en Isla de Pascua:
– Aunque nosotros siempre reservamos a través de Rentalcars en todos nuestros viajes, en esta ocasión únicamente pudimos hacerlo en Chiloé, ya que para Isla de Pascua no tenían ninguna opción.
– Alquilar directamente con el alojamiento. En nuestro caso, al estar alojados en el Hangaroa Eco Village Spa no teníamos esa opción, pero si te alojas en alguna de las muchas cabañas de Isla de Pascua, podrás conseguir, en la mayoría de los casos, alquilar directamente con el propietario.
– Alquilar con alguna compañía de alquiler de coches, tal y como hemos hecho nosotros con Rent a Car OCEANIC. El precio es de 45000CLP por día y no incluye seguro, ya que en Isla de Pascua, por lo que nos explicaron no existe este extra.
Si no quieres alquilar días completos, por ejemplo 2 días y medio, hacen una media y no tienes que pagar días completos.

– No sabemos si puedes alquilar turismos, en nuestro caso preferimos directamente un 4×4, ya que aunque la mayoría de carreteras de Isla de Pascua están asfaltadas, en muchas ocasiones, para ir a los lugares más apartados tienes que circular por carreteras sin asfaltar, por las que con un turismo sería inviable.
Con el coche de alquiler ya en nuestro poder, lo siguiente que tenemos que gestionar es comprar el ticket que nos dará acceso a todos los lugares de Isla de Pascua. Esto es algo que aunque quieras evitar, deberás hacer, ya que entre los lugares que se incluyen, están todos los lugares importantes de Rapa Nui.
Ticket de Isla de Pascua
En el año 1935 la zona protegida de Isla de Pascua fue declarado Parque Nacional, par después, en 1995 ser declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO y desde el 2016, co-administrado por la CONAF y la comunidad local Ma’u Henua.
Para poder acceder al Parque Nacional Rapa Nui hay que pagar una entrada, que aunque hace algún tiempo, únicamente pedían en Orongo y Rano Raraku, a día de hoy la piden en prácticamente el 99% de las localizaciones del parque, por lo que te recomendamos que compres el ticket el primer día que quieras empezar a visitar la isla para evitar sorpresas.
El ticket para acceder al Parque Nacional Rapa Nui tiene una validez de 10 días a partir del primer control que pases y tiene un precio de 80$ – 54000CLP (adultos) y 40$ – 27000CLP (niños).
Con él podrás visitar todos los puntos de la isla las veces que quieras, menos Rano Raraku y Orongo, que únicamente se pueden visitar una vez.
Puedes adquirirlo en el puesto que está en la zona de acceso del Aeropuerto Mataveri durante el horario de llegada de los vuelos, en la Oficina Central ubicada en la calle Atamu Tekena (está justo al lado de la oficina de alquiler de coches Oceanic, donde verás una tienda de tatuajes y justo detrás una pequeña caseta blanca de dos pisos donde pone billetería) o en la Oficina Provincial de la CONAF de Mataveri.
Al estar en la zona centro de Hanga Roa, optamos por acercarnos hasta la Oficina Central, donde vemos que el precio de 30000CLP a subido a 54000CLP desde el 1 de enero, por lo que nos toca pagar ese nuevo importe, aunque con un «extra» y es que a partir de este año, la validez ha subido de 5 a 10 días.
Como comentábamos antes, si estás varios días en Isla de Pascua, puedes planificar las visitas en función del tiempo que haga. En nuestro caso, hoy que ha amanecido un día soleado y la previsión del tiempo es que se mantenga, hemos decidido seguir una ruta que nos lleve por algunos de los lugares más emblemáticos de la isla como Rano Kau y Orongo, entre otros tantos.
Ruta sur Isla de Pascua (medio día)
Esta ruta nos llevará por la parte sur de Isla de Pascua para visitar Ahu Tahai, Ahu Ko Te Riku, Rano Kau y Orongo y Vinapu.
El tiempo para hacer estas visitas será aproximadamente de medio día, trasladándote en coche y tomándote las visitas con mucha tranquilidad, para poder disfrutar de los lugares de la mejor manera posible.
La primera parada que hacemos en el la zona de Tahai, donde ya estuvimos ayer por la tarde y donde estábamos deseando volver para disfrutar del lugar a esta hora de la mañana, ya que la luz a estas horas del día es perfecta y ofrece una visión mucho más clara de los moais.


Esta mañana podemos ver con mucha más claridad el círculo de piedra o Paina que está justo delante de Ahu Ko te Riku, que era el lugar en el que se celebraba una ceremonia cuando un hijo quería homenajear a su padre o madre. En este caso se creaba una figura humana, construida de madera y tela de corteza que se ubicaba dentro del círculo de la plataforma de la familia.
El hijo se metía dentro de la figura e iba narrando diferentes episodios destacables del homenajeado, agradeciendo al mismo tiempo la asistencia a todos los invitados.


Como intuimos, y como nos pasó ayer, el lugar aunque hay gente, está muy tranquilo y se puede disfrutar del lugar y de una paz realmente increíble y mágica, que nos hace volver a sentir de primera mano la energía y la magia del lugar.
Estando aquí aprovechamos también para acercarnos de nuevo y hacer una foto a la rampa que se utilizaba antiguamente para bajar las canoas, que está entre Ahu Vai Uri y Ahu Tahai y donde nos encontramos con un chico que está adentrándose en el mar con su embarcación, pudiendo ver en directo parte de este deporte tan famoso en Rapa Nui.

Estamos a punto de despedirnos, sólo por hoy, de Ahu Tahai cuando inesperadamente escuchamos que nos llaman. Sólo nos hace falta agudizar un poco el oído para reconocer las voces de Carles y Cris, que han venido hasta aquí para hacer algunas tomas de la zona y con quien casualmente volvemos a encontrarnos. Y como no podía ser de otra forma, aprovechamos para pasar un rato de charla, además de hacernos una foto que recuerde nuestro encuentro en Isla de Pascua, uno de los lugares más mágicos del mundo.

Después de poco más de media hora de charla, nos despedimos y volvemos a nuestro coche de alquiler para irnos hasta dos de los lugares más increíbles de Rapa Nui, Rano Kau y Orongo, en la parte sur de la isla, desde donde estamos a unos 3 kilómetros y medio aproximadamente.
Ya solo por la carretera y la paz que se respira tanto en la isla como conduciendo, tenemos que decir que merece la pena el viaje, sobre todo cuando nos damos cuenta que es mucho más de lo que esperábamos y todo lo que aún nos queda por descubrir.

En la carretera que asciende hasta Rano Kau y Orongo nos encontramos con las que dicen, son algunas de las mejores vistas de la isla y de Hanga Roa. Lo mejor es seguir hasta el indicador que señala el lugar exacto del mirador, desde donde se tienen unas vistas espectaculares de prácticamente 180º.

Desde aquí vemos claramente Teravaka, el punto más alto de la isla, y también Poike, el primer volcán que entró en erupción en la isla y que se encuentra en el extremo este de la isla. Además, justo enfrente tenemos la visión de Hanga Roa y la pista de aterrizaje del aeropuerto Mataveri, donde justo ayer aterrizamos.
Reserva los tours y las excursiones en español mejor valoradas de Isla de Pascua por viajeros:
– Tahai, Orongo y el volcán Rano Kau
– Tour por la isla de Pascua y la playa de Anakena
– Tour de 1 día completo a Anakena
– Excursión a Ahu Akivi
– Visita guiada por Hanga Roa
Las sensaciones en este momento nos embargan y es que tenemos una mezcla de escepticismo por estar aquí y casi ni creérnoslo, con un sentimiento un tanto raro cuando pensamos que si miramos al horizonte no encontraríamos tierra firme hasta llegar a la costa de Chile, a 3700 kilómetros.
Después de estar aquí unos minutos, disfrutando del paisaje, volvemos al coche y seguimos la carretera unos metros hasta llegar a Rano Kau, donde aparcamos justo en la zona delantera, en el espacio habilitado para los coches.
No tenemos más que andar unos segundos para encontrarnos frente al mirador Rano Kau y frente a una imagen realmente espectacular. Ese tipo de imágenes que aunque hayas visto 1000 veces en cientos de fotografías hay que vivir y hay que ver en persona para realmente darte cuenta de las maravillas de la naturaleza y lo interesante e importante que es Isla de Pascua que nuestro mundo.


Rano Kau en Isla de Pascua
Rano Kau es el cráter más grande de Rapa Nui y está considerada como la maravilla natural más impactante de la isla. Según leemos, hace más de dos millones de años, en Isla de Pascua hubo una gran erupción con la que se creó este impresionante cráter de más de 1 kilómetros de diámetro.
Si desde el mirador las vistas son impresionantes, empezar a andar, en el sentido de las agujas del reloj, es una verdadera maravilla, ya que a medida que vas avanzando, la perspectiva es mucho más amplia, viéndose perfectamente la zona «mordida» del cráter, que se llama Kari Kari y es por el único lugar que se ve el mar.


Algo que, aunque ya habíamos visto en fotos, nos llama mucho la atención es ver como el lago del interior del cráter está prácticamente cubierto de totoras, unas plantas que bajo el agua tienen en algunos casos más de 15 metros, y que forman, junto al color del agua, una imagen realmente increíble.

Después de estar varios minutos sin mediar palabra, seguimos caminando unos minutos hasta llegar a una zona desde la que tenemos una perspectiva única, aprovechando para sentarnos en uno de los bordes para poder disfrutar al máximo y cargarnos de energía en uno de los lugares más impresionantes que hemos tenido la gran suerte de conocer en nuestros viajes.


Desde aquí se puede hacer una caminata de unos 20 minutos, bordeando el cráter que te lleva a conocer Rano Kau y Orongo desde esta otra perspectiva y que esperamos poder hacer alguno de los próximos días, aunque nos han comentado que en esta zona de la isla suele soplar bastante el viento, por lo que si esto pasa, nos podemos dar por satisfechos después de hacer disfrutado de las increíbles vistas que hemos tenido hoy.
Son más o menos a las 12:30 del mediodía cuando abandonamos el Rano Kau para dirigirnos a Orongo otra de las visitas top de Isla de Pascua, que no te puedes perder y menos estando en el cráter, ya que se encuentra a sólo 5 minutos en coche.
Después de seguir unos metros más la carretera, llegamos a Orongo donde aparcamos el coche justo en la entrada y donde directamente pasamos a una sala en la que se hace el control de tickets y desde donde se pasa directamente a la visita.
Comentarte que en la gran mayoría de puntos de interés de Isla de Pascua no hay infraestructuras como tal, es decir, no hay baños, ni posibilidades de comprar agua o comida. Únicamente encontrarás estos servicios en Orongo, Rano Raraku y Anakena, por lo que merece la pena tenerlo en cuenta y más o menos preveer las necesidades del día antes de salir de Hanga Roa para poder comprar todo lo necesario.
Orongo
Con una ubicación espectacular, al borde del cráter Rano Kau, y rodeado de algunos de los acantilados más impresionantes de la isla, Orongo es otro de los lugares más importantes, a la vez que más interesantes, de Isla de Pascua.
Aunque la visita es bastante intuitiva, te recomendamos que sigas más o menos un orden para no perderte ninguno de los puntos más importantes. Nada más entrar, debes pasar los cárteles y la zona de descanso que está a la derecha y girar a la derecha cuando encuentres un camino que se bifurca.
Pocos metros más adelante te encontrarás con tres motus que están frente a la costa.

Motu significa islote y en Isla de Pascua puedes encontrar 15, aunque estos tres son los más conocidos y también los más grandes: Motu Kao Kao, con forma de aguja, Motu Iti, el más pequeño y Motu Nui, el más grande de los tres.
Esta zona es perfecta para aprovechar, sentarte en uno de los bancos y simplemente disfrutar del lugar, de la naturaleza y también para entender y comprender la cultura Rapa Nui, ya que Orongo era uno de los lugares más importantes de la isla.

En la época de los moáis Orongo era un importante centro ceremonial en el que se celebraban las ceremonias de iniciación y paso a la madurez de los niños y niñas, aunque en ningún momento se vivió aquí, ya que su situación hacían imposible la pesca, por lo que era imposible establecerse aquí de manera permanente.
Más adelante, en el s. XVII, momento en el que las guerras tribales surgieron en la isla y después de estar agotados todos los recursos de la isla, las tribus fueron a buscar nuevos territorios, al mismo tiempo que empezaron a derribar los sagrados moáis.
Después de la pérdida de la religiosidad, ese debía buscar una nueva forma de instaurar el orden, algo que se consiguió a través de la Competencia del Hombre Pájaro, una competencia en la que se ponían a prueba las diferentes tribus a través de pruebas físicas y mediante la cual, el ganador daba a su tribu el control.
Si sigues el sendero, verás algunas de las 54 casas de esta aldea ceremonial, en la que por cierto está inspirado el Hangaroa Eco Village Spa, donde nos alojamos, y que fueron restauradas por William Mulloy y algunos locales en 1974.

Si te fijas, la fila de casas que está más arriba, está prácticamente descubierta, por lo que se puede ver parte de su interior. Se puede ver como su construcción era de keho, unas piedras de basalto de un cráter cercano, con gruesos muros que protegían de los fuertes vientos que hay en esta zona de la isla.

A medida que vas avanzando por el sendero se puede ver perfectamente como algunas de las casas tenían varias entradas e incluso algunas estaban conectadas entre ellas. Estas cosas únicamente se utilizaban para dormir, ya que la vida diaria tenía lugar en el exterior.

Cuando empieza la bajada hay una casa con cuatro entradas. Este lugar es lamentablemente famoso ya que en el año 1868, la tripulación del Topaze se llevaron de su interior el móai Hoa Hakananai´a, el único moái que tiene figuras talladas en su espalda y que a día de hoy se encuentra en el Museo Británico de Londres.
Desde aquí puedes seguir el camino desde donde se ve el final de la aldea, dejándonos una imagen realmente espectacular de Orongo.

La última casa de la hilera es la más importante de Orongo, y es la que era utilizada por los sacerdotes que se encargaban de la ceremonia de los Hombres Pájaro. Al estar en mal estado actualmente no se puede llegar hasta ellas, al igual que a los petroglifos que allí se encuentran y que únicamente se pueden ver a día de hoy desde la distancia.

La visita a Orongo nos lleva aproximadamente una hora, yendo muy tranquilos y tomándonos las cosas con tranquilidad, intentando descubrir cada lugar que describe el libro «Descubriendo Isla de Pascua», que compramos ayer y como no, intentando quedarnos con todos los detalles, tanto en nuestra retina como en nuestra cámara.
Entre una cosa y otra vemos que son ya la 1:30 del mediodía por lo que decidimos acercarnos hasta el Hangaroa Eco Village Spa para comer y descansar un rato antes de proseguir con la segunda parte de la ruta que tenemos planeada para el día de hoy.
Pero como en Isla de Pascua todo es mágico, a medida que avanzamos por la carretera y dándonos cuenta que estamos a sólo 15 minutos de otro de los puntos más importantes de esta zona de la isla, Vinapu, decidimos alargar un poco más la mañana y acercarnos hasta allí.
Para llegar a Vinapu tienes que recorrer la carretera que va paralela a la pista de aterrizaje del aeropuerto de Isla de Pascua, algo que también puedes utilizar como punto de visita, ya que mucha gente viene hasta aquí teniendo apuntados los horario de los aterrizajes y los despegues, para ver como los aviones llegan y se despiden de Isla de Pascua.

Una vez que llegamos a Vinapi dejamos el coche en el parking que hay justo delante y empezamos una visita más que interesante en este increíble lugar.
Vinapu
Vinapu es uno de los lugares más interesantes de Isla de Pascua para comprender el proceso de tallado de los ahus, plataformas, sobre las que se encuentran los moáis.
Aquí se encuentran los restos de tres plataformas, aunque de una prácticamente no queda nada y actualmente es inaccesible totalmente para los viajeros.
Las otras dos, Ahu Tahira y Ahu Vinapu, son las que se puedes ver y disfrutar en esta zona de Rapa Nui.
Ahu Tahira
Viéndola de frente ya impresiona y es que ver 6 moáis boca abajo, con 3 tocados frente a ellos, es una verdadera maravilla.

Aunque a simple vista, esta plataforma ya es increíble, lo más impresionante está tras lo que se ve de frente, donde se llega dando la vuelta por la parte derecha y desde donde podemos ver algunos detalles que hacen, cuanto menos, plantearse ciertas cosas.
Sólo hay que ver el trabajo de las piedras que la conforman, que en algunos estudios incluso se han comparado con otras culturas, para darse cuenta de la maravilla frente a la que nos encontramos.



En esta parte de la plataforma, la trasera, también encontramos un moái semienterrado, que después de varios estudios se ha determinado que perteneciese a la misma plataforma, llegando a la conclusión de que probablemente fuese de un periodo anterior. Mirándolo de cerca se puede ver como no tiene las cuencas de los ojos talladas, por lo que se sabe que nunca estuvo sobre una plataforma.

Ahu Vinapu
En esta plataforma más antigua se pueden ver los restos de 5 moáis y varios tocados, que están esparcidos por la parte delantera y trasera del ahu.
Además se puede ver una gran columna de piedra roja que está ubicada frente a la plataforma y que fue desenterrada por el arqueólogo Mulloy.


La visita de Vinapu es de más o menos 30 minutos, siguiendo la guía y tomándolo con tranquilidad, así que cuando son algo más de las dos de la tarde, empezamos el regreso al Hangaroa Eco Village Spa, aprovechando para hacer una breve parada en Ana Kai Tangata, otra de las visita que tampoco puedes perderte en esta zona de Isla de Pascua.
Ana Kai Tangata
Para acceder a esta cueva tienes que bajar por un pequeño sendero, aproximadamente 5 minutos, hasta llegar a un cartel desde donde salen los escalones a través de los cuales se desciende a la cueva.

Ana significa cueva y Kai comer, por lo que durante mucho tiempo mucha gente a traducido mal este lugar como «cueva de los caníbales«. Esto a día de hoy se sabe que no es correcto, ya que en Rapa Nui antiguo la palabra kai significaba algo parecido a juntar o reunir, por lo que se entiende que este lugar era un lugar de reunión.

Si te fijas en el muro del fondo se pueden ver varias pinturas de aves, aunque a día de hoy están bastante borrosas y por lo que nos explica la chica que vigila el lugar, se teme que haya desprendimientos, al igual que poco a poco las pinturas se van deteriorando cada vez más.

Esta otra impresionante visita nos lleva unos 20 minutos aproximadamente, que disfrutamos muchísimo y nos regalan un final perfecto a una mañana de lo más completa.
Desde aquí viendo que ya son las 3 y hemos hecho prácticamente todo lo que teníamos planeado para el día decidimos volver al hotel para poder comer y relajarnos un rato, darnos una ducha y esta tarde cambiar un poquito los planes si aguanta el buen tiempo para aprovechar a hacer alguna visita importante y así asegurarnos poder disfrutarla con buen tiempo.
Pasan unos minutos de las 3 de la tarde cuando ya estamos sentados en una mesa del Restaurante Poevara disfrutando de una tabla de entrantes para dos, unos camarones, un plato de carne y un par de postres, acompañados de dos cafés que nos dan energías para seguir con la planificación de hoy.



Después de la sobremesa, cuando son las 3:30 de la tarde y viendo que el día sigue espectacular, decidimos irnos a descansar un rato, algo que tenemos que decir se agradece muchísimo y más después de tantos días de ruta, hasta las 5 de la tarde que decidimos acercarnos hasta Ahu Akivi, que es uno de los lugares que nos quedaban más alejados del resto de lugares que queremos visitar en la isla y que hemos creído que es el momento perfecto para disfrutarlo con tranquilidad.
Ruta sur Isla de Pascua
Como podrás haber visto, el día de hoy lo hemos empezado prácticamente a media mañana al ir a recoger el coche de alquiler y comprar el ticket de Isla de Pascua, por lo que este itinerario de la tarde, que únicamente es de una visita, Ahu Akivi, y se puede añadir perfectamente al de la mañana, ya que también está cerca de Hanga Roa, y hacer una ruta de mediodía muy completa.
Para recorrer Isla de Pascua no estamos utilizando el GPS, si no que utilizamos el mapa offline que tenemos en el móvil o Google Maps con la conexión que tenemos, algo que nos va genial para acortar un poco los caminos, aunque también tenemos que decir que es una suerte llevar un 4×4, ya que así podemos acortar por caminos de tierra por los que con un turismo hubiese sido imposible.

Llegamos a Ahu Akivi a las 18:30, encontrándonos solos ante uno de los lugares más increíbles de Isla de Pascua. Sentimos utilizar tanto palabras como increíble o maravilloso, pero es que es imposible describir de otra manera esta tierra tan mágica.
Ahu Akivi
Esta fue la primera plataforma que se restauró de manera completa en la isla y una de las cosas de las que más se ha hablado y de las que más llaman la atención es la dirección hacía la que miran los moáis, ya que miran directamente al mar, cuando todos los moáis están de espaldas.
Después de muchos estudios se ha determinado que estos moáis siempre han estado en esta posición, mirando a la aldea, que a día de hoy se encuentra totalmente en ruinas.

La plataforma mide 90 metros de largo, aunque la plataforma en la que están los moáis mide algo menos, exactamente 38 metros. De los 7 moáis, el más alto mide 4 metros y como se puede ver, todos tienen unas estructuras bastante similares.

Una de las cosas que muy poca gente hace y que te aseguramos que merece la pena, y mucho, es dar la vuelta a Ahu Akivi, pasando por su parte trasera, desde donde se pueden observar todos los detalles de uno de los moáis más increíbles que hemos visto hasta el momento.

Estando en Ahu Akivi también disfrutamos de cómo en Isla de Pascua también cambia el tiempo en cuestión de segundos, nublándose y descargando una fugaz lluvia, que a su paso deja en cada rincón de Rapa Nui la magia de la isla, que al mismo tiempo nos regala una visión única: un arco iris sobre los moáis que estamos seguros, no olvidaremos nunca.

Después de estar aquí algo más de una hora, nos ha encantado este lugar, decidimos que es el momento de regresar a Hanga Roa y aprovechar para hacer una parada y tomar algo en alguno de sus muchos locales.
Después de dar una vuelta por la calle principal acabamos en la zona de La Caleta, una zona donde ahora mismo ya están todas las barcas de pescadores, y donde encontramos muy buen ambiente decidiéndonos a parar en una especie de cafetería pastelería donde tomamos un zumo de frutilla, por cierto es buenísimo así que si tenéis la oportunidad, no dejéis de probarlos, y un café doble con hielo por 6900CLP.

Son las 8:30 de la tarde cuando volvemos al coche y nos acercamos hasta uno de los puntos más mágicos de la isla, Tahai, donde ya hemos estado tres veces desde que llegamos a Isla de Pascua y donde hoy vivimos un atardecer impresionante, con el cielo bastante despejado, que nos recuerda, de nuevo, qué afortunados somos.

Tenemos que comentar que aunque hay bastante gente que ya está esperando este momento del día, podemos decir que la gente está bastante separada, por lo que se está bastante bien y es muy tranquilo, así que queda más que recomendada la experiencia, ya que merece muchísimo muchísimo la pena. Eso sí, hay que tener en cuenta que hay que adquirir el ritmo de Isla de Pascua, venir con tranquilidad, sentarse y sobre todo, disfrutar.


Son casi las 10 de la noche cuando regresamos al Hangaroa Eco Village Spa, entrando directamente en el Restaurante Poevara donde disfrutamos de una cena increíble, con la que nos despedimos de un día de lo más completo en Rapa Nui.
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