Día 3 : Colmar – (Turckheim – Kaysersberg – Riquewihr – Hunawihr – Ribeauvillé)
Hoy, el tercer día de nuestro viaje a Alsacia en Navidad, suena el despertador a las 6:30, y es que hoy toca hacer una ruta en coche de e Turckheim a Ribeauvillé, acercándonos hasta Turckheim, Kaysersberg, Riquewihr, Hunawihr y Ribeauvillé, que son algunos de los más conocidos de esta zona.
Pero antes de nada hay que cargar energías, así que después de trabajar un poco nos acercamos a una pastelería justo al lado del hotel Ibis Centre, donde desayunamos un par de pastas y café y café con leche por 7,40 euros.

Ya con el estómago lleno nos ponemos en marcha con una ruta que tenemos en mente, de la que al final, hemos eliminado Niedermorschwihr al ver que ya íbamos a tener un día lo suficientemente apretado como para hacer otra visita más.
Atravesando Colmar a estas horas con el coche nos damos cuenta que a estas horas el centro está completamente vacío, así que tomamos la decisión de aprovechar mañana un rato antes de irnos hacia Estrasburgo para volver a recorrerlo y poder hacer algunas fotos sin tanta gente.

Desde Colmar a Turckheim, la primera parada de la ruta en de Turckheim a Ribeauvillé, tenemos 8 kilómetros que hacemos en unos 10 minutos con un cielo completamente despejado y en el que empiezan a lucir los primeros rayos de sol, algo que cuando miramos las previsiones del tiempo hace unos días no era ni de lejos lo esperado, volviendo a recordarnos la gran suerte que seguimos teniendo con el tiempo en nuestros viajes y que sigue haciéndonos pensar en «ese algo o quizás alguien» que sigue mirando por nosotros.
En el camino de Colmar a Turckheim también nos vemos rodeados de viñas como ayer cuando íbamos de Eguisheim a Colmar y es que no podemos olvidar que esta zona de Francia, a parte de ser conocida por la Navidad es también conocida por su famosa Ruta del Vino de Alsacia.
Si no quieres alquilar coche, una buena opción es reservar este tour por los pueblos de Alsacia o este tour por los mercadillos de Navidad de Alsacia, ambos salen desde Colmar y cuentan con un guía en español.

Nada más llegar a Turckheim dejamos el coche justo en la entrada, en la Plaza de la República, donde no hay que pagar nada para conocer este bellísimo pueblo a pie, sin duda la mejor forma de hacerlo.
Turckheim es un pueblo tan pequeño que se puede visitar en poco menos de una hora, aunque no por ello es menos interesante o especial.
Empezamos la visita parándonos frente a una de las entrada del pueblo, uno de sus rincones más bonitos y más escénicos, sobretodo en esta época del año.


Desde aquí nos vamos a recorrer su casco histórico empezando por la Grand Rue que es donde se ubican unos cuantas paradas de mercadillo, a estas horas aún cerradas, pero que ya empiezan a recordarnos en la época en la que estamos.
Pese a que hay algunas casas muy bonitas, la calle en el último tramo está en obras algo que la desluce bastante y que nos hace volver sobre nuestros pasos para dirigirnos al centro del casco histórico.

En pocos minutos llegamos a la Place Turenne, donde encontramos el Ayuntamiento y una iglesia con una gran torre, donde también se encuentra el famoso calendario de adviento de Turckheim donde se van abriendo ventanas desde el día 1 hasta el día 24 de diciembre cada día a las 5 de la tarde.

Son las 10 de la mañana cuando damos por acabada esta la visita a Turckheim, el primero de la ruta de Turckheim a Ribeauvillé y nos ponemos camino a Kaysersberg, la que será la segunda parada del día.

De Turckheim a Kayserberg tenemos 8 kilómetros y otros 10 minutos de trayecto en el coche de alquiler en Alsacia que nos hacen comprobar en primera persona lo cerca que están en Alsacia unos pueblos de otros, algo que también nos paso en nuestro reciente viaje a Midi-Pyrénées, aunque allí quedaban un poco más alejados unos de otros.
Nada más llegar aparcamos el coche en un parking de las afueras, por 2 euros el día, que está a unos 500 metros de Kayserberg. Por si no queréis ir andando hasta el pueblo, os comentamos que vimos autobuses que llevan hasta allí, que aunque nosotros no lo utilizamos, creemos que es una buena opción si venís con niños o hace mucho frío.
Más información práctica para preparar tu viaje a Alsacia
– 10 lugares que ver en Alsacia imprescindibles
– 10 consejos para viajar a Alsacia imprescindibles
– Ruta por Alsacia en Francia (2,3 y 4 días)
– 10 lugares que visitar en Colmar imprescindibles
– Dónde comer en Alsacia: restaurantes recomendados
Tal y como entramos en Kayserberg, por su calle principal, ya vemos que hoy volverá a ser un día de multitudes y es que a estas horas ya todas las tiendas están llenas de gente y se empieza a respirar ese ambiente navideño del que estamos rodeados desde que llegamos a Alsacia.

Mercados Navideños Kaysersberg
Fechas: del 27 al 29 de noviembre / del 4 al 6 de diciembre / del 11 al 13 de diciembre / del 18 al 20 de diciembre / del 21 al 23 de diciembre
Horario: de 10:00 a 20:00
En Kaysersberg encontramos el Mercado Navideño en el patio del Arsenal, al lado de la Oficina de Turismo y podemos encontrar un pequeño mercado de artesanías y productos locales.Cada año las fechas de los diferentes mercadillos de navidad cambian, por lo que te aconsejamos mirarlas en la sección correspondiente de la página web de la Oficina de Turismo
Kayserberg podemos decir que es una calle principal, con una bella plaza en la que también encontramos una iglesia y olor a canela o queso, según el momento y el lugar en el que te encuentres. Parecen pocas cosas así a simple vista, pero os podemos asegurar que no hace falta nada más para enamorarte a primera vista de un pueblo.

Siguiendo la calle principal llegamos a un edificio, donde en el interior descubrimos un Mercado de Noel impresionante, lleno de tiendecitas artesanales que nos atrevemos a decir, nos llama mucho más la atención incluso que los de Colmar, en lo que a regalos se refiere.
Como decíamos Kayserberg es poco más de una calle, pero esta rebosa alegría y ambiente en cada una de sus tiendas y mercados artesanales, que hacen de este un pueblo uno de los más agradables que hemos visitado hasta ahora en este viaje a Alsacia en coche.
Es media mañana, así que aprovechamos para tomar un chocolate caliente por 2 euros más 2 euros por una taza de cristal, que también nos llevamos como recuerdo, que nos acompaña hasta llegar al final de la calle, donde nos encontramos con el famoso puente de piedra, rodeado de casitas que parecen sacadas de un cuento navideño.


Una vez llegados aquí retrocedemos sobre nuestros pasos para recorrer una calle paralela a la principal, también muy animada y con muchas tiendecitas que nos dejan aún más enamorados de Kayserberg si es posible.
Volvemos andando al parking, que a estas horas ya está completo y nos montamos en el coche cuando son algo más de las 12 del mediodía. Ha llegado el momento de ir de Kayserberg a Riquewihr, la que es nuestra siguiente parada de la ruta por Alsacia en Navidad y que se encuentra a solo 8 kilómetros y 10 minutos.
Como comentamos antes, en toda esta zona los pueblos están muy cerca unos de otros por lo que es perfecto hacer una ruta de un día entre ellos si cuentas con coche.
En este punto tenemos que decir que hemos visto un autobús que hace la ruta entre Colmar y los pueblos de Alsacia más importantes como Turckheim, Kaysersberg, Riquewihr y Ribeauvillé, así que después de ver esto, podemos confirmar que se puede plantear también está ruta en autobús si no queréis alquilar coche
Llegamos a Riquewihr cuando son las 12:15 del mediodía y lo primero que nos toca hacer es buscar parking, algo que hacemos después de superar la caravana que hay para entrar en el pueblo de más de un kilómetro y medio y es que se empieza a notar que el día avanza y cada vez más gente está recorriendo estos encantadores pueblecitos de Alsacia.

Hay varios parkings en Riquewihr, uno a las afueras del pueblo y varios de pago dentro. Os recomendamos que si hay mucha afluencia de gente entréis en uno de ellos y esperéis a que salga alguien. Probablemente de esta forma encontréis antes una plaza libre que si vais dando vueltas, al menos eso nos ha pasado a nosotros, que al final sólo hemos tenido que esperar 10 minutos en el parking principal del pueblo, justo a unos metros de su centro histórico. Pagamos 3 euros por 4 horas, también se pueden pagar 2 euros por 2 horas y allá que nos vamos a recorrer uno de los pueblos más famosos de Alsacia: Riquewihr

Mercados Navideños Riquewihr
Fechas: del 28 de noviembre al 27 de diciembre
Horario: de lunes a viernes de 10:00 a 18:30. Sábados y domingos de 10:00 a 20:00 (menos el 24 de diciembre que cierra a las 18:00 y el 25 de diciembre que abre a las 14:00)
En Riquewihr encontramos el Mercado Navideño alrededor de las murallas y en la Place Fernand Zeyer, rodeado de un ambiente festivo y lleno de luces.Cada año las fechas de los diferentes mercadillos de navidad cambian, por lo que te aconsejamos mirarlas en la sección correspondiente de la página web de la Oficina de Turismo
Nada más entrar nos encontramos con bastante seguridad, como nos ha pasado ya en varios de los pueblos que hemos visitado y es que después del atentado en París de hace unas semanas, es normal que el ambiente esté un poco tenso y se intente evitar cualquier problema.
Viendo la hora que es y viendo que en Riquewihr no cabe ni un alfiler más en estos momentos, decidimos que lo mejor es buscar un sitio para comer, así que nos vamos directos a l’Arbertrie, muy recomendado en Tripadvisor, donde después de hacer unos 15 minutos de cola, nos sentamos dispuestos a degustar la deliciosa gastronomía alsaciana.
Pedimos un menú con quiche y choucroute, un plato típico alsaciano que lleva choucroute y diferentes clases de carne y una tarte flambee periguourde que lleva magret de canard, foie y manzana, más una cerveza de Noel, especial en estas fechas, coca cola más una tarta de postre que incluye el menú y por supuesto 2 expressos para acompañar la sobremesa por 52 euros.

Hay que decir en honor a la verdad que la tarte flambee estaba espectacular. El choucroute no ha estado mal, pero hay que decir que para Roger no ha sido un plato al que le haya tenido mucho aprecio.
Salimos pasadas casi a las 2:30 del mediodía, dispuestos a empezar a recorrer Riquewihr y dejarnos envolver por su increíble ambiente navideño.

La calle principal está repleta de tiendecitas a cada cual más bonita y casas a cada cual mejor adornada, en las que te irías parando a cada paso para poder admirarlas y hacerles fotos. Vamos ascendiendo, la calle principal hace un poco de pendiente, embriagados en todo momento por un olor a vino y canela hasta que llegamos a la torre de Riquewihr de 25 metros o Dolder, uno de sus enclaves más icónicos.

Como comentamos en los anteriores, en Riquewihr tampoco tenemos una ruta definida o unos lugares puntuales que visitar. Estos pueblos son para callejearlos y degustarlos paseando y perdiéndose por las encantadores callecitas empedradas, rodeadas de casas de colores y tiendecitas que parecen competir entre ellas para ver cuál es la más increíble.

Justo al final de la calle encontramos, en la esquina anterior, la tienda Käthe Wohlfahrt, famosa por ser una de las muchas que hay por el mundo, donde incluso podemos encontrar una zona con piezas traídas de Belén, que reconocemos de nuestros viaje a Israel y Palestina de hace unos años.

Para nuestra sorpresa hay una cola de más de 20 minutos, que hacemos pacientemente, esperando encontrar aquí el souvenir que nos llevemos de este viaje a Alsacia. Y así (no) es…entramos en un increíble mundo de fantasía, donde cada pieza cuenta una historia y donde al final no encontramos nada de lo que buscamos y es que mentiríamos si no decimos que somos un poco especiales con esto de los regalos y normalmente buscamos alguna pieza especial o artesanal que no siempre es fácil localizar.
Faltan unos minutos para las 4 de la tarde, hora en que se acaba nuestro horario de parking y decidimos que ya ha llegado el momento de poner camino a Hunawihr, la próxima parada del día, que se encuentra a solo 4 kilómetros de Riquewhir y donde únicamente queremos ir para dar un pequeño paseo.
Riquewhir a estas horas de la tarde está prácticamente intransitable, incluso vemos cantidad de coches aparcados en el arcén de la carretera y en los caminos que atraviesan los viñedos y es que Alsacia en Navidad podemos decir que es una verdadera maravilla, pero también una zona en la que si buscas tranquilidad, probablemente no la encontrarás a no ser que te alejes de los pueblos más famosos y también más encantadores.
Llegamos a Hunawihr a las 4:15 de la tarde, donde después de aparcar el coche en la entrada damos una breve vuelta por sus calles, la verdad que sin demasiado interés, según lo que estamos buscando, por lo que creemos es una parada bastante prescindible si no tenéis mucho tiempo.

Volvemos al coche para ir a la que será la última parada de hoy: Ribeauvillé, ubicado a solo 3 kilómetros de Hunawihr y donde ya el GPS nos avisa del tráfico congestionado que hay a estas horas.
Llegamos allí a las 16:30 de la tarde, después de atravesar viñedos y más viñedos, que nos recuerdan que debemos volver a esta zona en época más veraniega para disfrutar del verde de los paisajes y de un poco más de tranquilidad.
Volvemos a ver como los coches aparcan en los arcenes de la carretera, a prácticamente 2 kilómetros del pueblo y como nos pasó en los anteriores, decidimos que lo mejor es entrar en el pueblo y probar suerte. Y así lo hacemos teniendo la suerte del principiante, como se suele decir, encontrando un sitio en un parking en la zona alta de Ribeauvillé en el que incluso, no se tiene que pagar.
Ribeauvillé es solo una calle, con varias plazas en las que se concentran los mercados navideños. Pero esto no le resta ni una pizca de encanto, al revés, al ser tan diferente al resto de pueblos que hemos visitado, le encontramos una magia de lo más especial.

Ribeauvillé gira en torno a la Grand Rue, donde se mezclan mercados navideños con mercados medievales, muy diferente a todo lo que hemos visto hasta ahora y que nos sorprende para bien. A parte está anocheciendo por lo que el ambiente toma un aire de lo más especial y es que estos pueblos franceses son totalmente distintos cuando el sol se oculta y aparece la luna.


Haciéndonos hueco entre la gente, vemos unas figuritas artesanales de unos papa noel regordetes que destacan entre el resto y que a partir de este momento han pasado a formar parte de nuestros recuerdos viajeros.
Son más de las 6 de la tarde cuando después de tomar un par de chocolates calientes servida en una taza de cerámica que también se viene con nosotros por lo que pagamos 3 euros cada uno, volvemos a recorrer la Grand Rue en sentido contrario, encontrándonos ahora con un Ribeauvillé totalmente iluminado.


Son más de las 6 de la tarde cuando nos ponemos rumbo a Colmar, el que vuelve a ser nuestro alojamiento para esta noche, a 25 kilómetros y unos 30 minutos en coche desde Ribeauvillé.
Llegamos casi a las 7 de la tarde y después de dejar el coche en el parking privado del hotel Ibis Centre, os recomendamos tener un parking de pago en esta época del año, más que nada por ahorrar tiempo ya que no son muy caros, nosotros pagamos 7 euros el día y te ahorran muchísimo tiempo.
Aprovechamos para ir un rato a la habitación a dejar las cosas que hemos comprado en este recorrido de Turckheim a Ribeauvillé y descargar las fotos del día antes de salir sobre las 8 a cenar, ya con la firme idea de poder hacer fotos nocturnas después de cenar.
Miramos varios restaurantes y justo al lado del hotel tenemos Capresse, y viendo que tiene muy buenas opiniones y al estar un poco más alejado del centro no hay colas, allá que nos vamos a cenar une tarte flambee, se nota que nos estamos aficionando, ¿verdad? y un salmón con patatas más agua por 34 euros que acaban de darnos energías para seguir con esta última etapa del día.

Pasadas las nueve y media de la noche nos vamos a la zona centro de Colmar para disfrutar prácticamente en soledad, aún quedan algunos turistas haciendo fotos, de esta zona iluminada.


Si podemos decir que pasear por Colmar es como hacerlo por un cuento infantil, no os podemos describir qué se siente al hacerlo por la noche, cuando las luces navideñas lo adornan todo y la mayoría de turistas han abandonado las calles.

Sin duda alguna esta es la mejor hora para reconciliarse con esta Alsacia navideña, que en ocasiones, a los que somos poco dados al gentío y las aglomeraciones, nos acaba cargando un poco.

Pasan las 10 y media de la noche cuando volvemos a nuestro hotel a descansar. Mañana aún nos queda mucho día por delante, en el que llegar a Estrasburgo, otro de los puntos claves de este viaje.
Seguro de viaje para Francia
Para viajar a Francia, nada mejor que contar con un buen seguro de viaje.
Nosotros siempre viajamos asegurados con Mondo, con quien llevamos un seguro totalmente adecuado a las necesidades que vayamos a tener en el viaje.
Contratando aquí tu seguro con Mondo, sólo por ser lector de Viajeros Callejeros, tienes un 5% de descuento.
Deja un comentario